Télam
Gabriela Yasmin Hernández Quintana
Mayo 2021
Una colaboración del Programa de Jóvenes del Comexi
Uno de los temas más recurrentes durante 2021 ha sido tanto la vacunación como la recuperación económica. Cada país y región se ha enfocado en recuperar tanto la salud de sus ciudadanos como la economía y el comercio. En este sentido, el cuestionamiento a nuestro sistema económico es cada vez más común, pues han surgido nuevas propuestas y políticas que buscan, además de reactivar a la economía, un verdadero cambio en los intereses y la forma en que se evalúan los programas económicos. En este sentido, la Unión Europea se ha destacado al aprobar un presupuesto enfocado al medio ambiente y la digitalización.
Como respuesta a la pandemia y la creciente necesidad de reactivar la economía, la Unión Europea aprobó un paquete de recuperación económica de 750 000 millones de euros, con el nombre de NextGenerationEU. Dicho paquete se suma al presupuesto a largo plazo ya establecido durante 2020 de 1074 billones de euros, logrando un total de 1824 billones de euros para reparar los daños económicos y sociales causados por la pandemia. Asimismo, este nuevo presupuesto busca colaborar para lograr una Europa modernizada y sustentable, con objetivos específicos sobre el medio ambiente y la transición a una economía tecnológica, que incluyen propuestas vinculadas a un mecanismo de ajuste en las emisiones de carbono, un impuesto digital y el régimen de comercio de derechos de emisión de la Unión Europea. Como parte de su estructura, este plan contempla que más del 50% del presupuesto esté dirigido a la modernización de la Unión Europea por medio de la investigación y la innovación, a la transición digital y que esté en favor del medio ambiente, así como generar acciones de preparación, recuperación y resiliencia. Por otro lado, el 30% del presupuesto se dirigirá exclusivamente a la lucha contra el cambio climático, incluyendo programas de protección a la biodiversidad. Finalmente, el 20% restante será invertido en la transformación digital.
La Europa posterior al covid-19 busca ser más ecológica, más digital, más resiliente y mejor adaptada a los retos actuales y futuros.
La Europa posterior al covid-19 busca ser más ecológica, más digital, más resiliente y mejor adaptada a los retos actuales y futuros. Los objetivos plasmados en este renovado presupuesto, y en específico el NextGenerationEU, son un paso importante tanto al interior de la Unión Europea como en la esfera internacional, pues marca una pauta de como una coyuntura, como lo ha sido la pandemia y la crisis económica que generó, presenta también la oportunidad de repensar la economía y redirigirla. NextGenerationEU otorgará 390 000 millones de euros de subvenciones y 360 000 millones de euros de préstamos a bajo interés a los países miembros. Cabe mencionar que tanto el plan económico como la forma en que se logró constituir son innovadores y representan un gran paso de la integración europea, pues se trata de un préstamo conjunto en el que la Comisión Europea es quien ha pedido el préstamo a nombre de todos los Estados miembros con apoyo del Banco Europeo de Desarrollo. Asimismo, será la Comisión Europea la que evaluará los planes en los que se utilizará el presupuesto, y el Consejo Europeo los aprobará para su aplicación. Los Estados miembros ya han comenzado a adoptar medidas de política presupuestaria de apoyo a la liquidez para aumentar la capacidad de sus sistemas sanitarios y prestar ayuda a los ciudadanos y a los sectores especialmente afectados.
La cooperación internacional frente al covid-19
Para la Unión Europea, la cooperación internacional ha sido imprescindible durante la pandemia, y la recuperación económica no será lo contrario. La llegada y la distribución de las vacunas han dado tranquilidad a muchos países para comenzar a planear y reactivar sus economías. La promoción del reparto de vacunas equitativo por medio del Fondo de Acceso Global para Vacunas contra el Covid-19 (COVAX) también ha sido un frente importante en la cooperación internacional para los países de la Unión Europea, pues en algunos casos los países miembros han donado y financiado la vacunación aún sin haber vacunado por completo a su población, lo que ha demostrado un verdadero sentido de solidaridad y acción hacia una recuperación mundial y equitativa.
Asimismo, la Unión Europea ha colaborado con 38 000 millones de euros para ayudar a otros países a responder a la pandemia. Por otro lado, para la Unión Europea lograr una recuperación económica que, además, logre transformar la economía y la guie hacia sus objetivos medioambientales y tecnológicos es, sin duda, una prioridad. Se busca generar oportunidades en el ámbito de la tecnología y la innovación mediante soluciones duraderas e igualitarias para la sociedad, que tengan repercusiones tanto al interior de la Unión como a nivel internacional, haciendo frente a los grandes retos, como el cambio climático.
Impacto en la recuperación de Latinoamérica
Europa y Latinoamérica comparten una historia y principios comunes en diferentes ámbitos que explican el fuerte vínculo que han mantenido ambas regiones en la historia. La Unión Europea es el tercer socio comercial de América Latina y el Caribe, tras Estados Unidos y China. La importancia entre ambas regiones se refleja en acuerdos comerciales y la Estrategia Global para la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea, de 2016, en la que se establece la necesidad de reforzar un espacio atlántico más amplio y se propone establecer asociaciones más intensas con los países de la región.
Además, la Unión Europea dispone de la mayor red mundial de acuerdos comerciales con Latinoamérica, lo que representa una gran oportunidad para ambas partes. Dichos acuerdos y tratados comerciales han creado una relación fuerte y duradera entre ambas regiones, impulsando el comercio y la inversión. Sin embargo, nuevos retos, como la pandemia de covid-19, han llevado a los países a retraerse y enfocarse en lo interno. En este sentido, la caída de la economía de América Latina y el Caribe en 2020 fue la más pronunciada del mundo, al caer 7%. El crecimiento para 2021 se proyecta en 4.6%, por debajo del 5.8% estimado para los mercados emergentes, excluyendo a China, y se estima que el ingreso per cápita no alcanzará su nivel anterior a la pandemia hasta 2024. Esta nueva realidad requiere de acciones concretas y cooperación internacional en materia de comercio e inversión, además de planes estratégicos que reactiven y lleguen a toda la población.
Con este paquete de recuperación económica, Europa relanza su economía a nivel interno, y las repercusiones de estas nuevas prioridades y objetivos reflejan un claro camino hacia economías sustentables y digitales a nivel mundial. En este sentido, como socio estratégico de la Unión Europea, Latinoamérica tendrá nuevas oportunidades en diferentes sectores, incluyendo el comercio, pues se buscarán más intercambios comerciales que se alineen a los valores y los intereses establecidos en estos planes presupuestarios. El objetivo es mitigar el impacto económico y social de la pandemia y hacer que las economías y las sociedades europeas sean más sostenibles, resilientes y estén mejor preparadas para los retos y las oportunidades de las transiciones ecológica y digital, así como dar seguridad y confianza a nivel internacional sobre temas que son cada vez más importantes, como el medioambiental, el científico y el tecnológico.
GABRIELA YASMIN HERNÁNDEZ QUINTANA es licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad Iberoamericana, con especialidad en Política Global. Ha colaborado con la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid) y el Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques del Senado de México. Además, es miembro del programa de Jóvenes del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi). Sígala en Twitter en @Gaby_HdzQ.
Tags:Covid-19, Medio ambiente, Recuperación económica, Unión Europea
