Elías Camhaji
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Actualmente, pocos cuestionan el estatus del deporte, en general, y del futbol, en particular, como un fenómeno globalizado y globalizante, que despierta pasiones minuto a minuto en prácticamente todos los rincones del planeta.
En medio del frenesí causado por las superestrellas con sueldos multimillonarios y por los partidos legendarios, lo que sucede lejos de los campos de juego queda a menudo relegado también de los debates especializados y de los titulares principales. En este sentido, la apuesta de Alberto Lati es buscar un escape a los reducidos espacios televisivos y a las rígidas fechas de entrega en la prensa escrita para recuperar los relatos que parecían estar condenados a quedarse en el tintero, pero que merecían ser recordados y rescatados del olvido futbolístico y periodístico.
En Latitudes: crónica, viaje y balón, Lati no solo hace un recuento de los viajes que lo llevaron a cubrir los acontecimientos deportivos más importantes de los últimos años y a conocer a algunos de los personajes que marcaron el rumbo de este deporte. Además, el autor da cuenta de las experiencias que lo llevaron a integrarse a nuevas culturas, a comunicarse en idiomas insólitos y a ser testigo de realidades -sociales, políticas y religiosas- impactantes.
Más que una recopilación de anécdotas personales, su libro es un testimonio del carácter paradójico del futbol alrededor del mundo. Cada capítulo es un reflejo de cómo, en coyunturas específicas, el balón puede actuar como una fuerza unificadora y constructiva, mientras que en otras puede adquirir un carácter francamente disruptivo.
Por ejemplo, pocos imaginarían que, al saberse ganadores de la Eurocopa 2004 y tras presenciar el regreso de la antorcha a las tierras del olimpismo, el júbilo de Grecia se esfumaría dramáticamente entre instalaciones abandonadas y movilizaciones masivas que ponían de manifiesto el descontento de un país hundido por la crisis económica, la corrupción y los gastos excesivos durante la organización de la justa olímpica. A la luz de los contrastes sociales en Sudáfrica 2010 y de las manifestaciones civiles durante la Copa Confederaciones de 2013, esta tendencia parece repetirse en la víspera del Mundial de Brasil, la meca futbolística por excelencia, con protestas que exigen menos estadios a cambio de mejores condiciones de vida para el grueso de sus habitantes.
A su vez, en su recorrido por los claroscuros de este deporte, Lati narra con detalle el papel positivo que desempeñaron jugadores como George Weah en Liberia o Didier Drogba en Costa de Marfil para superar los rezagos del subdesarrollo en sus países, o la lucha de equipos como el Sankt Pauli para erradicar el fascismo de la sociedad y de las canchas de Alemania.
En suma, la obra ofrece perspectivas interesantes de los alcances globales del futbol y de cómo se inserta en distintos contextos económicos, políticos y sociales. En este sentido, con una narrativa fluida y accesible, Latitudes: crónica, viaje y balón demuestra cómo el deporte puede actuar como un vehículo que permite rebasar barreras culturales y lingüísticas para acercar al lector a realidades tan inusitadas como fascinantes.
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