Entre la ambivalencia y los desafíos para el gobierno entrante
Latinus
Santiago Taracena
Junio 2024
Una colaboración del Programa de Jóvenes del Comexi
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha sido un campo de batalla político no solo a nivel nacional, sino también en el ámbito internacional. Desde su llegada al poder, su enfoque ha suscitado controversias y ha marcado un notable contraste con las tradiciones diplomáticas establecidas en México. Su política exterior ha oscilado entre momentos de aislacionismo basado en principios constitucionales arraigados y episodios de confrontación ideológica que han distanciado a México de sus aliados tradicionales y han debilitado su influencia internacional.
A continuación, se explorarán diversos puntos para explicar y dar mayor contexto a lo que fue la política exterior de López Obrador.
La apuesta por Latinoamérica: solidaridad vs. controversia
El primer eje de la política exterior de López Obrador se centró en fortalecer lazos con Latinoamérica, especialmente con gobiernos de ideología afín, como los de Cuba, Nicaragua y Venezuela. Esta estrategia, aunque buscaba equilibrar la influencia estadounidense en la región, generó tensiones con países más moderados, como Brasil y Chile, así como conflictos abiertos con Argentina, Ecuador y Perú. Estas discrepancias no solo complicaron las relaciones bilaterales, sino que también posicionaron a México en un papel de controversia y aislamiento en algunos foros internacionales clave.
Relación con Estados Unidos: cooperación y fracturas
La relación bilateral con Estados Unidos, aunque se mantuvieron colaboraciones significativas en temas de seguridad y economía, estuvo marcada por diferencias sustanciales. La migración irregular hacia Estados Unidos fue un punto de tensión constante, exacerbado por las políticas migratorias estadounidenses y las demandas de control fronterizo. Además, el tráfico ilegal de armas de fuego y las acusaciones cruzadas sobre la producción de fentanilo complicaron aún más este vínculo crucial.
Olvido de los otros actores internacionales: Asia y Europa
El gobierno de López Obrador descuidó en gran medida las relaciones con Europa y el Sudeste Asiático, áreas cruciales para el desarrollo económico y la cooperación internacional. La falta de compromiso con países culturalmente tan cercanos, como España, y con organismos de relevancia como la Unión Europea derivó en la pérdida de oportunidades y en tensiones innecesarias, especialmente a raíz de incidentes históricos mal manejados que dañaron la imagen de México en el ámbito europeo.
Limitaciones en la diplomacia: un enfoque controlado y controvertido
Otro aspecto crítico de la política exterior de López Obrador fue su limitada participación en visitas diplomáticas y foros internacionales, una elección que refleja su preferencia por un control riguroso sobre las narrativas y su aversión a entornos menos predecibles. Esta estrategia, aunque podría haber garantizado cierta estabilidad interna, restringió las oportunidades de México para proyectar influencia y liderazgo en la escena internacional.
Conclusión y perspectivas
En resumen, la política exterior de López Obrador fue una combinación de intentos por fortalecer la solidaridad latinoamericana, enfrentamientos con potencias regionales y un enfoque selectivo hacia Estados Unidos, todo ello mientras se descuidaron relaciones críticas en otras partes del mundo. Este enfoque dejó a México en una posición ambivalente y, a menudo, aislada en un contexto mundial cada vez más interconectado.
El futuro de la política exterior mexicana bajo el próximo liderazgo será crucial para restaurar la coherencia y la efectividad en las relaciones internacionales, aprovechando las oportunidades de cooperación mundial y reconstruyendo puentes con aliados históricos. El desafío radicará en equilibrar pragmatismo y principios constitucionales, asegurando que México mantenga una voz relevante y respetada en el concierto internacional.
Claudia Sheinbaum, la virtual Presidenta electa de México, asumirá el cargo en un momento crítico donde la interacción con potencias mundiales y otros países será fundamental después de 6 años de cierto aislamiento diplomático. Este contexto cobra aún más importancia debido al significativo déficit fiscal que enfrenta México, lo cual subraya la necesidad de establecer relaciones sólidas con la comunidad internacional para fortalecer la economía nacional y atraer inversiones estratégicas.
Sheinbaum deberá navegar con habilidad en el ámbito internacional.
Sheinbaum deberá navegar con habilidad en el ámbito internacional. Esto no solo implica restaurar y fortalecer las relaciones bilaterales y multilaterales, sino también demostrar liderazgo en foros mundiales para posicionar a México como un socio confiable y atractivo para la inversión extranjera directa. Su capacidad para establecer puentes con otros países será puesta a prueba y será crucial no solo para la estabilidad económica, sino también para enfrentar desafíos transnacionales, como el cambio climático, la migración y la seguridad regional.
Además, necesitará el respaldo de la comunidad internacional para fortalecer su posición política, especialmente si llega el momento de decidir desmarcarse en ciertos aspectos de su antecesor y mentor político: López Obrador.
Desde sus primeros días como virtual Presidenta electa, Sheinbaum dedicó tiempo para responder a los mandatarios internacionales que la felicitaron, demostrando, al menos de inicio, un enfoque proactivo hacia la comunidad internacional. Al igual que eso, ha dedicado tiempo a mandar mensajes de tranquilidad a los mercados financieros, a pesar de que las acciones de su partido, el Movimiento Regeneración Nacional, causen lo contrario. Este acercamiento inicial subraya su compromiso con una política exterior distinta a la de López Obrador.
SANTIAGO TARACENA es licenciado en Relaciones Internacionales por la Universidad La Salle. Es consultor de asuntos públicos en Prospectiva Public Affairs Latam y asociado del Programa de Jóvenes del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (PJ Comexi). Sígalo en Twitter en @santi_taracena.
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